Daniel Passarella: "En este momento no estamos para salir campeones, ni para traer refuerzos de jerarquía, ni para ir a fondo con la auditoría a Aguilar, ni nada de eso que uno promete en campaña".

Paraguas para todos. Sería la propuesta de Daniel para cuando se venga la tormenta.

"La papada no se la hizo con plata del club, eso es seguro", afirma Daniel Alberto Passarella, actual presidente de River Plate. Eso es lo que, hasta hoy, se habría llegado a determinar con la auditoría que El Kaiser mandó a realizar sobre la turbia y devastadora gestión de José María Aguilar como presidente de River Plate (2001-2009). "Mm no, nada más por ahora", agrega. La institución de Nuñez vive el peor momento de su historia. No participa en copas internacionales, y no lo ha hecho con éxito en sus últimas apariciones. Pelea el descenso en el campeonato local, y cerró el 2010 con un déficit de 80 millones de pesos, y un pasivo de $220.000.000. "Necesitamos que Lamela la rompa y venderlo por 20 millones de euros", se entusiasma Diego Turnes, Vicepresidente del club. "Que no pase como con Funes Mori que Daniel lo quizo mostrar en el Sub-20 para que se cotice y ahora todos se avivaron de que es un muerto de mierda", cierra, eufórico. A la complicada situación económica y financiera de la institución, se suma la falta de cracks que el club históricamente sacaba de sus inferiores y la ausencia de refuerzos de jerarquía que puedan suplir esa carencia, y posicionar al equipo como candidato serio a conseguir el Torneo Clausura o, al menos, meterse en una competencia internacional. "Y encima viene este Jota Jota no se cuánto y echa al Burrito por copetearse un par de veces. Si después la descoce igual loco ¿Cuál es?", reclama, enardecido, un fanático del Millo. Daniel Alberto Passarella, con el slogan de campaña "Se acabó la joda", había prometido la auditoría a José María Aguilar, reforzar al equipo repatriando ídolos como D`Alessandro, Crespo, Saviola o Aimar, y llevar a River Plate nuevamente a ser protagonista y a conseguir títulos. Sin embargo, en sus últimas declaraciones, el ex jugador, ex Dt y actual presidente de River dió a entender que se acabó la joda, sí, pero después había after-hour. "No estamos para salir campeones, ni para ir a fondo con la auditoría, ni para ninguna de esas cosas que uno, de piola nomás, promete en campaña", sentenció. "Aunque sea que vuelva Jairo Patiño, o Archubi", gritaba desesperado un socio vitalicio del club cuando se cortaban los micrófonos.
El tiempo, o como otros prefieren llamarlo, Grondona, dirá qué pasa con la famosa auditoría y el futuro de River Plate.